Y el elemento más importante para conseguirlo era, según su opinión, el remolino implosivo.
Sus propuestas, no recibieron mucha atención hasta que el japonés Masaru Emoto volvió a dar difusión a ese tipo de ideas en sus libros.
El concepto de agua vitalizada ha sido calificado como pseudociencia y charlatanería por expertos en la materia.
En el proceso judicial quedó demostrado que las unidades de tratamiento no tenían ningún mecanismo para tratar o filtrar el agua.
La juez afirmó en su auto que la publicidad de Ecoworld NZ «contenía inconsistencias, curanderismo y pseudociencia».