En su vertiente negativa, Airón se nos manifiesta como el dios de la muerte, pues el inframundo era el lugar a donde se consideraba —en las religiones precristianas— que iban a parar las almas de los muertos, tanto los que habían llevado una vida ejemplar como los que habían cometido los más graves delitos aunque, una vez en el inframundo, allí cada cual recibía un trato diferente según hubieran sido sus obras en esta vida.
Los topónimos conocidos como «Pozo Airón», ya se refieran a pozos, lagunas, simas, cascadas, ríos, fuentes o parajes, tienen una relación directa con este dios cuya antigüedad probablemente se remonte al neolítico (entre 6.000 y 3.000 años a. C.).
La lista de los topónimos Airón hallados hasta el momento en España es la siguiente: Portugal Francia Inglaterra Italia Brasil México Entre las diversas leyendas y romances referidos al pozo Airón destaca el romance «Ya se van los siete hermanos», que dice así:
[4] A comienzo del siglo XIX se encontró en Uclés (Cuenca), junto a Fuente Redonda, una ara votiva que dice así:[5] La traducción al castellano de este texto latino, una vez completado el texto abreviado, es la siguiente: «Al dios Airón erigió la familia usetana?
En la cueva de la Griega en Pedraza (Segovia) también se encontró una inscripción epigráfica, a siete centímetros del suelo, bastante deteriorada, de la que quedan los siguientes datos: «GAIVS [espacio para cinco letras] AIRON [tres letras ilegibles, probablemente NEM] VALER [IVS]», nombre bastante repetido en la cueva.