Alberto Cuello

[3]​ Mostró con suma regularidad la calidad de su juego técnico y vigoroso, que le permitieron descollar, durante años en los torneos profesionales.

También fue partícipe de los dos títulos ganados en forma consecutiva en 1936[4]​ y 1937,[5]​ bajo la dirección del entrenador húngaro Emerich Hirschl.

Ese año ganó su último título nacional y se retiró del activo jugando contra Banfield,.

[6]​ Cuello llegó a la selección en 1929: en ese año fue convocado al Campeonato Sudamericano como defensa suplente.

En 1937 fue convocado nuevamente a participar en una Campeona Sudamericana; seleccionado por el entrenador Seoane, Cuello todavía estaba incluido entre las reservas.