Hijo de Alejandro Freundt Noble y Constanza Rosell Cacho.
Se recibió de abogado y pasó a ejercer la docencia en su alma mater.
[4][5] Durante su gestión, propuso la necesidad de convocar una conferencia sudamericana para unir a todo el subcontinente en la lucha contra los avances del comunismo.
El gobierno británico no mostró interés en reabrir ese asunto y el gobierno peruano tampoco lo elevó al Tribunal de La Haya, como lo había anunciado.
[12] Pasó luego a ser embajador en Gran Bretaña (1952-1954) y en Brasil (1954-1955).