Alf Palmer (1891-1981) o Jinbilnggay en su lengua nativa, fue el último hablante de una lengua aborigen de Australia[1] llamada warrungu.
Vivió en Townsville, Queensland (Australia).
Trabajó junto con los lingüistas Tasaku Tsunoda de Japón y Peter Sutton de Sídney, Australia, para preservar su idioma.
Estaba muy entusiasmado con conservar su lengua y le repetía constantemente a Tsunoda "Soy el último que habla warrungu; cuando muera, esta lengua morirá.
Le enseñaré todo lo que sé, así que tome buena nota de ello".