La alferza, también llamada antiguamente fiz, ferz o firzan, es una antigua pieza del juego del ajedrez que fue sustituida por la dama o reina.
Incluso en la actualidad, la palabra para la Dama es Ферзь (ferz) en ruso y vezér en húngaro.
Se situaba junto al rey y era el equivalente de un visir o consejero real, pero en el juego su poder respecto a otras piezas era escaso: se desplazaba sólo una casilla cada vez en diagonal adelante o atrás, excepto en su primer movimiento, en el que podía avanzar tres en diagonal o en horizontal, incluso saltando otras piezas.
La primera mención de la alferza en idioma castellano se encuentra en los Libros del ajedrez, dados e tablas de Alfonso X el Sabio.
Fue el experto ajedrecista Francesch Vicent, de Segorbe, quien propuso este cambio transcendental, seguido de otros como el nuevo papel del alfil.