Así que, dos años más tarde se inició en este arte por el maestro León Untroib, fue cambiando poco a poco sus trabajos a fileteados.
Vivió dos años en Italia, donde trabajó en serigrafía artística y murales.
En 1993 regresó a Buenos Aires y trabajó con Cacho Monastirsky en técnicas de trampantojo.
En 1996 conoce al maestro Ricardo Gómez, de quien aprende a filetear carros y camiones.
En 2004 fue curador del concurso de murales organizado por el Museo Casa Carlos Gardel, en lo que se denomina actualmente El Paseo del Tango, en el barrio de Abasto.