Alief (estado mental)

[1]​ Por ejemplo, una persona parada en un balcón transparente puede creer que está a salvo, pero no poder evitar sentir que está en peligro al mismo tiempo.

Una persona que ve una película triste puede creer que los personajes son completamente ficticios, pero sus aliefs pueden hacerle llorar de todos modos.

Un alief es un estado mental asociativo, que se diferencia de las actitudes proposicionales como la creencia, la imaginación, la pretensión al no ser lingüístico y, por ello, no relacionarse con ningún contenido proposicional.

Por el contrario, se enfatiza la naturaleza de ser un estado, porque implica la inervación del cuerpo.

[4]​[5]​[6]​ Tanto un alief como una creencia pueden manifestarse en una misma persona a la vez, y ambas categorías mentales comparten un rol representacional y motivacional, fungiendo como detonantes comportamentales:[7]​ El término alief fue introducido por la filósofa estadounidense Tamar Gendler, profesora de filosofía y ciencia cognitiva en la Universidad de Yale, en un par de artículos influyentes publicados en 2008.

Tamar Gendler en 2018.