El almuerzo, también conocido como Almuerzo de campesinos y Muchacha y dos hombres a la mesa, es una obra atribuida a Velázquez, quien la habría pintado en Sevilla en los comienzos de su carrera.
La radiografía ha revelado un arrepentimiento en el dedo pulgar levantado del hombre joven situado a la derecha, lo que indica la meticulosidad con la que el pintor aborda su tarea.
[2] Manuela Mena afirma, por otra parte, que la limpieza última «ha revelado una técnica lisa y seca, como de copia, que estaba oculta bajo los barnices amarillos», presumiendo por ello que se trate de una derivación pintada por otro artista del lienzo del Ermitage o una copia de un original perdido.
El cuadro pertenece al género de los bodegones que según Francisco Pacheco pintaba Velázquez para adquirir por esa vía «la verdadera imitación del natural».
[6] El hombre sentado a la derecha, sin duda lo mejor del lienzo, varía respecto del que ocupaba igual posición en la versión del Ermitage únicamente en la posición de la cabeza, que ahora no se dirige hacia el espectador, buscando su complicidad, sino hacia el anciano que tiene situado enfrente, repitiendo como en la copia de lord Moyne, Andover, el estudio de cabeza de perfil del Ermitage.