La carga del horno eléctrico está constituida de chatarra principalmente.
En el baño se lleva a cabo una reacción de oxidación – reducción (proceso redox).
El calor se encuentra en la parte superior de la carga, siendo necesario en general usar bobinas electromagnéticas a fin de inducir a una agitación en el recipiente para que el material más frío del fondo alcance la parte superior igualándose de esta forma la temperatura y la composición química.
Para generar escoria se añade cal, caliza, etc.
El contenido en nitrógeno suele ser elevado debido a las altas temperaturas generadas inmediatamente por debajo de los electrodos (3500 °C) aunque se mantiene a un nivel aceptable para la mayoría de los aceros.