Aunque reconoce tener estos problemas, Mark decide salir adelante.
Su idea es finalizar un proyecto que ha tenido pendiente durante los últimos años, consistente en una película titulada Northwestern.
Para conseguir el financiamiento necesario, Mark decide completar otro de sus proyectos pendientes, un cortometraje en blanco y negro titulado Coven que comenzó a filmar en 1994.
Su idea es vender tres mil VHS del filme para poder reunir el dinero que necesita.
[3] Dos años más tarde, el periódico The New York Times la incluyó dentro de "las 1.000 mejores películas jamás creadas".