Amparo López Jean

En esta ciudad se matriculó en el Instituto Eusebio da Guardia y posteriormente estudió Magisterio.

Empezó a convivir ―sin casarse, lo que era un escándalo en esa época―[1]​ con el conocido escritor, periodista y político republicano César Alvajar (La Coruña, 1892 - París, 1965).

Recién se casaron cuando empezaron a tener hijos, y lo hicieron por los niños, para que no fueran discriminados en la escuela.

[6]​ Aunque en su infancia había sido gallegohablante exclusiva, en su casa de familia ahora se hablaba castellano.

[1]​ De acuerdo con sus convicciones religiosas, hizo que todos sus hijos tomaran la primera comunión.

[5]​ Javier tuvo que esconderse mucho tiempo después de un juicio sumarísimo por haberse pasado del frente franquista al republicano para poder reunirse con sus padres en Barcelona.

Pero se hizo amiga de un tal Barbadillo (fiscal militar del bando sublevado), que le tenía simpatía.

El fiscal llegó a ofrecerle un sueldo y ella lo rechazó porque no estaba justificado.

Una noche, cuando en el patio formaban los reclusos y el recinto estaba en silencio, a la jovencísima María Teresa Alvajar, entonces de 18 años, se le ocurrió entonar una canción con la música de la joven guardia roja.

Después del final de la Guerra civil, cuando toda España quedó ocupada por los franquistas, Amparo y su esposo lograron escapar a Francia.

Cuando su esposo consiguió sacarla del campo, viajaron juntos a Calvados (Normandía), donde trabajaron en una fábrica de toallas.

[5]​ Tiempo después, Teresa y Ana María pudieron huir a Francia con los primeros pasaportes emitidos por la dictadura franquista.

[5]​ En Montauban, Teresa trabajó en una fábrica de tejidos,[8]​ se casó y allí nació su hija.