En 1922, inició su carrera en el club Portuguesa, donde su padre, Manuel Augusto Marques, era dirigente.
En 1925, fue transferido al Paulistano, donde jugó junto a Arthur Friedenreich.
Ese mismo año, el Paulistano enfrentó un partido amistoso ante la selección de Francia en Europa.
Debido a la existencia de dos ligas en dicha época, Filó pudo competir en la Asociación Atlética de Deportes Paulista por el Corinthians, ganando el torneo en 1929 y el Campeonato Paulista en 1930.
Así, jugadores paulistas como Filó, Friedenreich y Feitiço no pudieron participar en el torneo mundial.