Angelika Speitel

Speitel trabajó como empleada en la oficina del abogado Klaus Croissant, junto a su esposo Volker Speitel (que también era un terrorista de la RAF).

[2]​ Volker pasó a la clandestinidad en 1974, y Angelika hizo lo mismo cuando fue sospechosa de estar involucrada en el asesinato de Jurgen Ponto en 1977.

[1]​ Se sospecha que estuvo directamente involucrada en el secuestro y asesinato de Hanns Martin Schleyer.

Lotze logró escapar, y Knoll murió más tarde producto de sus heridas.

[7]​ Durante su encarcelamiento intentó suicidarse colgándose y cortándose las muñecas, pero sobrevivió.