La angiografía cerebral es una forma de angiografía que proporciona imágenes de los vasos sanguíneos dentro y alrededor del cerebro, lo que permite la detección de anomalías como malformaciones arteriovenosas y aneurismas.
Se toman una serie de radiografías a medida que el agente de contraste se propaga a través del sistema arterial del cerebro, luego una segunda serie a medida que llega al sistema venoso.
Además, la angiografía cerebral permite que ciertos tratamientos se realicen de inmediato, según sus hallazgos.
La embolización (una técnica quirúrgica mínimamente invasiva) a lo largo del tiempo ha desempeñado un papel cada vez más importante en el tratamiento multimodal de malformaciones arteriovenosas cerebrales, facilitando el tratamiento microquirúrgico o radioquirúrgico posterior.
[7] Sin embargo, todavía se usa ampliamente para evaluar varios tipos de patologías vasculares dentro del cráneo.