Antioj Kantemir, hijo del príncipe moldavo Dimitrie Cantemir y de la princesa Kasandra Cantacuzeno, nació en Iaşi.
A este respecto, su esfuerzo más destacable es su Pétrida, un poema épico que glorificaba al zar.
Sus poemas mejor conocidos son varias sátiras al modo de Juvenal, incluyendo A mi parecer: sobre aquellos que culpan a la educación (1729) y Sobre la envidia y el orgullo de los cortesanos malintencionados.
Su obra filosófica propia, llamada Cartas sobre la naturaleza y el hombre ("O prirode i cheloveke") se publicó en 1742.
Antioj Kantemir murió soltero en París, aunque el litigio sobre sus supuestos hijos ilegítimos se arrastró por años.