Antonia Morales Jiménez

Esta cantaora ha sido ignorada por todos los medios periodísticos flamencos y ni siquiera se sabía la fecha de su nacimiento ni la de su defunción hasta que se publicó una nota rogando por su muerte en el periódico ABC.

Este disco, además, se complementa con un libreto con documentos gráficos e ilustraciones, y está compuesto por las siguientes canciones.

viene clareando el día súbete en la grupa mía María de los Dolores que vamos de romería Te has portado muy mal conmigo vienes para que te perdone y yo te perdono a ti como Jesucristo perdonó a sus enemigos momento grande antes de morir donde el agua no le llega si no lo riegan a mano que está propenso y se pierda La salud y la libertad eran prendas de gran valía que nadie cuenta se daba hasta que no están perdidas Dicen los sabios doctores que la ausencia causa olvido yo me he puesto varias veces y olvidarte no he podido La Perla de Triana alternó con los más grandes artistas del momento:[1]​[4]​ Eugenio Carrasco Morales fue hijo de La Perla de Triana.

Al igual que su madre, se consagró como artista de flamenco desde temprana edad en Málaga y, más adelante, en lo que pasó a ser su segundo hogar, el Barrio de Triana.

Encarna y ‘El Perlo’ siguieron formando parte del grupo hasta el final de sus días, pero Antonia se retiró al casarse.