Antonia de Sancha

Tras conocerse, la actriz y Mellor iniciaron una relación extramatrimonial, que finalmente salió a la luz en julio de 1992.

Cuando la prensa rosa británica destapó esta relación clandestina, algunos medios de comunicación describieron a Antonia de Sancha como «una actriz de películas pornográficas blandas», ya que había interpretado el papel de una prostituta coja en una película independiente titulada The Pieman.

Por su parte, Antonia de Sancha concluyó que su carrera como actriz había quedado irremediablemente truncada, por lo que decidió contratar al publicista Max Clifford para obtener algún beneficio del revuelo mediático.

En una entrevista de 2002 para el periódico The Guardian, la actriz afirmó que Clifford la había presionado para que se inventase diversos detalles escabrosos sobre su relación con Mellor, a fin de obtener más ingresos de sus entrevistas.

[1]​[2]​[7]​[8]​ Aunque la venta de su historia a los medios de comunicación le reportó entre 30 000 y 35 000 libras esterlinas, de Sancha ha declarado reiteradamente que el escándalo la dejó emocionalmente devastada.