Antonio Fernández López

Ese mismo año se casó con María Puentes Bujados y tuvo doce hijos: Gonzalo, José Luis, Pedro, Carmen, María Luisa, Ana María, Antonia, Marcos, Asunción (Siña), Santiago, Maria Manuela (Menela) y Concepción.

Fernández López participó en la puesta en marcha de muy diversas empresas, entre las que figuran Titania S.A. en 1936, Zeltia en 1939, Frilugo en 1941, Transfesa en 1942, Antibióticos S.A. en 1949, Frigsa en 1951, Cementos del Noroeste en 1958, Pescanova en 1960 y la Caja de Ahorros Provincial de Lugo en 1964, entre otras.

Contrató como primer director a Ricardo Carballo Calero, culto galleguista luego represaliado por el franquismo.

También propició la ampliación del Museo Provincial de Lugo en 1957, según proyecto del arquitecto vigués Manuel Gómez Román, donando además importantes piezas de su colección particular junto a su amigo y colaborador Álvaro Gil Varela.

Un colegio de O Oural (Sarria) lleva su nombre.