En Europa, el término "antropología médica" fue utilizado, ocasionalmente, durante el siglo XX para designar los estudios filosóficos sobre salud y enfermedad.
Fue la adaptación castellana del término neerlandés "medische anthropologie" acuñado en el siglo XIX, realizada por el historiador y filósofo Pedro Laín Entralgo en distintas obras.
Sin embargo, en la literatura científica en castellano, catalán, gallego o euskera el término antropología médica designa hoy a la medical anthropology.
La Antropología general ocupaba una posición relevante en las ciencias médicas básicas (que corresponde a las asignaturas comúnmente llamadas hoy pre-clínicas).
La divergencia entre la Antropología profesional y la Medicina no significó, jamás, una escisión completa entre ambas.
Tanto es así que numerosos antropólogos médicos proceden de las profesiones sanitarias (enfermería, psicología, psiquiatría, medicina).
Entre los médicos están W. H. R. Rivers, Jean Benoist, Gonzalo Aguirre Beltrán, Cecil Helman y Arthur Kleinman; muchos otros proceden de las ciencias sociales como George Foster, William Caudill, Byron Good, Tullio Seppilli, Gilles Bibeau, Lluis Mallart, Andràs Zempleni, Gilbert Lewis, Ronald Frankenberg, Els van Dongen o Eduardo Menéndez.
Durante buena parte del s. XX, médicos y antropólogos han compartido la noción de medicina popular, tradicional o folk -en inglés folkmedicine-.
En un principio, el sistema existió con el propósito de dar servicios a las personas más pobres y necesitadas.
Los reportes etnográficos demostraron que las crisis interestamentales tenían efectos directos en los criterios terapéuticos y en la atención a los enfermos.
En algunos países, como en Italia, hay un replanteamiento de las directrices en educación y promoción para la salud.
También desde los años sesenta, en los países desarrollados, la biomedicina se ve confrontada a una serie de problemas que exigen revisar los mal llamados factores predisponentes de naturaleza social o cultural, reducidos a meras variables en protocolos cuantitativos, y subordinados a interpretaciones causales de matriz biológica o genética.
Entre estos, deben destacarse: a) La transición entre un patrón dominante de patología infecto contagiosa aguda a un patrón de patología basado en enfermedades crónico degenerativas sin una terapéutica etiológica específica.
En los países latinos, hay maestrías específicas de antropología médica en México,[5] Brasil y España.
[7] En lenguas latinas (castellano, italiano, francés, portugués, gallego y catalán) hay un enorme volumen de bibliografía disponible sobre Antropología médica.
No siempre es fácilmente accesible, puesto que muchas ediciones, especialmente en América Latina, y no pocas en España son institucionales y se distribuyen mal fuera de los estados nacionales.
Enlazamos aquí una serie de páginas web externas con bibliografías básicas que pueden ser útiles a los lectores de lenguas latinas, puesto que antropología médica es el término común al castellano, italiano, catalán, portugués y gallego.