Es una tierra baldía en la costa de Aman, entre las montañas Pelóri y el gran océano.
[3] Es una franja relativamente estrecha de tierra baldía, desierta y montañosa, y su extremo septentrional sufre un clima severamente frío,[1][2] que se podría comparar a una tundra.
[4] Poco después también atravesaron en su persecución esta región los elfos noldor cuando salían a su exilio.
Como los barcos no eran suficientes para todos, porque se habían perdido muchos en el camino previo, Fëanor decidió partir sólo con los fieles de Alqualondë, abandonando en el desierto a sus propios parientes Fingolfin, sus hijos y los hijos de Finarfin, que los seguían en cumplimento de la palabra dada.
[9] Aunque Araman ya existía, por tanto, geográficamente en 1930, los hechos que Tolkien ubicó en la región, y en particular la «deserción de Araman», no tomaron su forma definitiva hasta escritos muy posteriores.