En categorías regionales son los comités territoriales de árbitros los que regulan el funcionamiento arbitral.
Tras superar los cursos para aspirar a árbitro, se obtiene la categoría de AUXILIAR.
En esta categoría, se puede arbitrar todo tipo de fútbol base (alevines, infantiles, cadetes y juveniles)y realizar asistencias como árbitro asistente en Liga Nacional Juvenil, División de Honor, y categorías regionales donde se requieran asistentes, como por ejemplo 2ª Regional y en raros casos 1ª Regional aunque todo esto puede variar dependiendo el Comité regional al que pertenezca el colegiado, ya que en otros no se permite que un árbitro actúe de asistente más allá de dos categorías superiores a la que ostenta.
Un caso aislado es el que ocurre en La Rioja, donde se comienza a arbitrar en Preferente al no existir categoría inferior.
Aquellos colegiados que por su posición el la clasificación superen el corte de ascenso, al año siguiente ostentarán la categoría inmediatamente superior, salvo excepciones.
Lo mismo ocurre con los colegiados en las últimas posiciones de la clasificación, que descenderán a la categoría inmediatamente inferior.