Estudió bandoneón con Nicolás Pepe, flauta con Santiago Bosco,[1] armonía y contrapunto con el maestro Ángel Turriziani, composición y orquestación con Héctor Tosar.
En esos años ejerció también la crítica y el periodismo musical en el Semanario Marcha de Montevideo.
En el bienio 1969-1970 fue becario del Centro Lationoamericano de Altos Estudios Musicales (CLAEM) del Instituto Torcuato di Tella en Buenos Aires, donde inició su trabajo con medios electroacústicos.
Fue durante varios años Profesor en la Universidad Nacional de Río Cuarto (Córdoba - Argentina), y más tarde trabajó en el Laboratorio de Investigación y Producción Musical (LIPM) del Centro Cultural Ciudad de Buenos Aires (actualmente Centro Cultural Recoleta), llegando a ser Director del Laboratorio.
Como compositor, Martínez se centró en la formalización de los procesos compositivos, y la composición algorítmica.