Tienen una raíz muy gruesa y carnosa, cilíndrica, desproporcionada al tallo, que posee tan solo 5 cm de longitud.
Son de color verde oliva oscuro y afieltradas en la base, con la parte superior más o menos plana, recorrida por un único surco muy lanoso a través del medio de las areolas.
Se disponen en espiral unas sobre otras, con una anchura basal y un espesor inferior a 1 cm.
La primera descripción de esta especie fue como Anhalonium kotschoubeyanum, publicada en 1844 por el botánico francés Charles Lemaire en la revista científica L'Horticulteur Universel 6: 63.
La especie se cultiva a menudo como planta ornamental aunque su crecimiento es demasiado lento.