Aritmómetro electromecánico

En el siglo XIX los ingenieros de la época tenían muchos problemas con la resolución de ecuaciones diferenciales y polinomios, por lo tanto muchos trabajaron en máquinas que ayudaran con estos cálculos.

Después Torres Quevedo se dedicó a implementar sistemas mecánicos para la resolución de polinomios y demás cálculos complejos.

Aquella transmite eléctricamente las indicaciones a la máquina propiamente dicha, que hace el cálculo y se comunica, a su vez, con la máquina de escribir, la cual a continuación de los datos escribe el signo ‘=’ y el resultado de la operación.

[2]​[3]​ La ‘era electromecánica’ que inició Torres Quevedo con este aritmometro la prosiguió Louis Coufignal en 1938 en un estudio donde describe una computadora binaria electromecánica.

En resumen, esta calculadora digital de sistemas electromecánicos sitúa a Torres Quevedo como un pionero de la automática actual y en buena parte de la informática que hoy conocemos.

Aritmómetro Electromecánico de Torres Quevedo (1920).