En la Universidad de Barcelona participó en la fundación del Sindicat Democràtic d'Estudiants (SDEUB), que desafiaba el sindicalismo único y vertical falangista.
Cuando el Frente se disolvió, pasó al grupo Comunisme, que reunía a buena parte del trotskismo catalán.
En 1980 escribió Anticarrillo, donde denunciaba la actitud del eurocomunismo español durante la reforma post-franquista.
Colaboró activamente con los núcleos trotskistas clandestinos vinculados a la lucha obrera del sindicato polaco Solidarność.
Otras obras suyas son Pequeño vocabulario político de marxismo (1998) y Globalización.