Tuvo primero su central en Buenos Aires, pero a causa de una dictadura en ese país tuvo que ser trasladada al Uruguay, primero, luego a Chile.
La AIT mandó a uno de sus secretarios, Augustin Souchy.
En dicho congreso, aparte de la sección Argentina tuvieron representación: Paraguay, por el Centro Obrero del Paraguay; Bolivia, por la Federación Local de la Paz, la Antorcha y Luz y Libertad; México, por la Confederación General de Trabajadores; Guatemala, por el Comité pro Acción Sindical; Uruguay, por la Federación Regional Uruguaya.
Desde Chile llegaron delegados de los Trabajadores Industriales del Mundo.
[1] La organización no alcanzó a tener el impacto significativo como para no dejar perder terreno al anarcosindicalismo dentro del movimiento laboral latinoamericano, frente a la izquierda latinoamericana y el populismo, en el transcurso de la década de los 30.