[1] Seis policías resultaron asesinados y otros dos quedaron gravemente heridos junto a ocho civiles, en el que fuera el atentado más mortífero de ETA en 1990.
[3][4] La semana anterior al ataque en Sabadell, las fuerzas de seguridad habían incautado incluso documentos a la organización en los que se detallaban estas intenciones.
[5] Cinco de los ocho policías que viajaban en aquel transporte perdieron la vida en el acto, y un sexto falleció poco después.
Los agentes asesinados eran Miguel Marcos Martínez, Ramón Díaz García, Juan José Escudero Ruiz, Juan Gómez Salazar, Francisco Pérez Pérez y Eduardo Hidalgo Cazo.
[5] Fuentes policiales atribuyeron la autoría del atentado al comando Barcelona de ETA, e identificaron a Joan Carles Monteagudo y Juan Félix Erezuma, los dos presuntos dirigentes de la célula terrorista, como partícipes del mismo.