Militante de las Juventudes Socialistas Unificadas, al término de la guerra civil se exilió en México, donde se nacionalizó y desarrolló una destacada trayectoria académica.
[2] Ese mismo año se trasladó a Madrid para estudiar Derecho en la Universidad Central.
José Cazorla decidió quedarse en Madrid para organizar la resistencia antifranquista, Aurora inició un largo viaje hasta atravesar la frontera en Cataluña.
De Cuba se dirigió a México, país en el que consiguió rehacer su vida personal y profesional.
En 1952 se doctoró en Derecho Constitucional en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) logrando en esta Universidad, la primera cátedra para una mujer en México en 1954.