La autodescarga es un fenómeno de reducción de la carga almacenada en baterías por medio de reacciones químicas internas sin que exista ninguna conexión entre los electrodos o cualquier circuito externo.
[1] La autodescarga disminuye la vida útil de las baterías y da lugar a que inicialmente tengan una carga inferior a la completa cuando realmente se ponen en funcionamiento.
[2] La autodescarga es una reacción química, al igual que la descarga en circuito cerrado, y tiende a ocurrir más rápidamente a temperaturas más altas.
Almacenar las baterías a temperaturas más bajas reduce la tasa de autodescarga y conserva la energía almacenada inicialmente en la batería.
También se cree que la autodescarga se reduce a medida que se desarrolla una capa de pasivación en los electrodos con el tiempo.