La autoexploración testicular es un procedimiento en el que el varón examina sus propios testículos y el escroto en busca de posibles bultos o hinchazón.
A partir de la pubertad en adelante deberían examinar sus testículos después de un baño o ducha calientes, que es cuando el escroto está más relajado.
A lo largo de toda la parte posterior del testículo y de consistencia blanda se encuentra en epidídimo que es donde se recogen los espermatozoides, y que no hay que confundir con un bulto.
Se recomienda consultar con un médico, generalmente un urólogo, en caso de encontrarse un bulto en un testículo.
Los testículos deben ser examinados por un médico si se advierte cualquiera de los siguientes síntomas: Algunos síntomas son similares a los de otras patologías que también requieren tratamiento y debe ser consultada con el médico: