Autorretrato a la edad de 63 años es un cuadro del pintor neerlandés Rembrandt.
Quedan rastros de una firma y la fecha a la izquierda: t[?].f./1669.
En segundo lugar, originariamente las manos estaban abiertas y sostenían un pincel.
Al pintar las manos cogidas, enlazadas delante de él, y sin el pincel se reduce su impacto dramático y permite que la atención se fije en la cara.
Esto, unido a la oscuridad del fondo, hace que toda la atención se concentre en el rostro, iluminado por un foco de luz.