Balletti verdi

Balletti verdi («ballets verdes») es el nombre con el que se conoce el mayor escándalo ligado al mundo homosexual en la historia italiana.

El nivel de histeria intentando implicar a personajes célebres del todo ajenos a los hechos (entre los acusados aparecían los nombres de Mike Bongiorno, Dario Fo, Franca Rame, Gino Bramieri, Paul Steffen y Bud Thompson) fue tal, que muchos fueron interrogados por los investigadores e inmediatamente encarcelados.

Fue el periódico Le ore el que dio su nombre al escándalo «balletti verdi» («ballets verdes»).

«Balletti» era el nombre que se le daba a todos los escándalos de fondo sexual en el que estuviesen envueltos jóvenes, a partir de los casos homólogos, aunque heterosexuales, franceses llamados «balletti rosa» y «ballets bleu».

La investigación fue dirigida por el juez instructor Giovanni Arcai, por Enzo Giannini del ministerio público y por el brigadier Arrigo Varano.

En Brescia, en la época, hubo un gran debate político: muy áspero fue el enfrentamiento entre los comunistas (que consideraban la homosexualidad como un vicio burgués, atacando a los católicos y dejando abierta la posibilidad de que algún sacerdote estuviese implicado en el escándalo) y los católicos.

El espacio para la sexualidad homosexual estaba reducido a encuentros fugaces en los cines o en los parques, siempre de noche.

Bastante improbable parece una implicación de las fuerzas católicas, que por otra parte no eran en absoluto indulgentes en su trato con las personas homosexuales.