Es una planta atractiva con hojas como plumas y grandes floraciones en espigas rojas a castañas.
Recolectada en 1829, cerca de King George Sound, su descripción fue publicada al año siguiente.
Es considerada como una especie rara y en peligro de extinción en su hábitat natural, cuyas poblaciones nativas se encuentran todas amenazadas por una enfermedad causada por Phytophthora cinnamomi, que pudre la raíz, mal al cual es altamente susceptible la especie.
Altamente valorada por la horticultura australiana y la floricultura, B. brownii es en la actualidad ampliamente cultivada en áreas no expuestas a Phytophthora.
Prefiere lugares abrigados en suelos con buen drenaje y se le debe garantizar humedad, especialmente en el verano.
Cada flor consiste en un periantio tubular, compuesto de cuatro tépalos unidos y un estilo alambrino.
Los estilos son rojo-castaño con un punto crema y curvados hacia abajo más comúnmente que rectos.
En un "cono" pueden estar encajados unos 60 folículos frutales,[3] sin embargo, frecuentemente hay muy pocos o incluso ninguno.
[12][13] Aunque no habían tenido definición taxonómica, el análisis genético ha determinado que estas formas deben clasificarse como dos subespecies.