Basílica des Fornàs de Torelló

Este yacimiento fue descubierto por un labrador, Toni Cadona, es Pagès d'es Fornàs, y entonces la arqueóloga María Lluïsa Serra lo estudió.

Actualmente está protegida por una tela metálica para evitar su deterioro, pero se puede observar perfectamente lo que era la basílica.

Fue construida entre los siglos V y VI d. C., en la época de Justiniano I, emperador romano de oriente que quería reconstruir el Imperio Romano y por eso había conquistado las Islas Baleares.

La basílica paleocristiana es una nave única orientada hacia levante y en ella se encuentra un mosaico romano que ocupa prácticamente toda su superficie.

Todos estos hechos están influenciados por la tradición judía, que en esa época tenía mucha importancia.