Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Extremadura, posteriormente se especializó en Medicina Intensiva, actividad que ejerce desde 1983 en la UCI del Hospital Universitario de su ciudad natal.
Este libro, revisado en profundidad, fue reeditado en 2002 (Amarú, Salamanca).
Como señala el profesor Miguel Ángel Lama en el texto que acompaña a esta recopilación, su poesía ha sido destacada por la crítica como una de las más sugerentes expresiones de poesía meditativa contemporánea, que no se queda en una contemplación ensimismada como punto de partida y de llegada, sino que muestra su vocación de conquista moral en un mundo en el que los pilares éticos se ven agredidos.
Basilio Sánchez utiliza la palabra poética para metamorfosear la realidad y, al hacerlo, enriquecerla o desentrañarla.
Su afán contemplativo no se detiene en la superficie de las cosas.
Es una permanente indagación en lo que éstas revelan, es una búsqueda de sus capacidades evocadoras y de las galerías que las comunican con la memoria del hombre y con la muerte.
Lenguaje poético claro, elemental y natural, pero bajo su misteriosa transparencia, late una honda reflexión sobre la condición humana y sobre la precariedad de la existencia, siempre necesitada de refugio.
Su poética acoge una de las dicciones más intensas de la poesía española contemporánea, configurada en una obra que no responde tanto a una deliberación literaria como a un estrecho acompasamiento entre existencia y poesía.
Exacto sin hipérbole, metafórico sin desafuero, habla a media voz, a veces casi susurra, convencido de que el exceso en el decir perjudica la verosimilitud de lo dicho.
Los ecos primordiales confieren al verso una naturalidad que destierran toda posible impostación o artificio.
Solo cuando la poesía se desprende de la hojarasca, cuando pierde el alambique, hay pureza en el canto.
Basilio Sánchez capta ese momento milagroso del desprendimiento, de la resta como opción artística para sumar así intensidad.