Batalla de Sardinal

Esto motivó a que el ejército costarricense movilizara dos columnas, una de 100 hombres y otra de 300, que llegaron hasta Sardinal, en Sarapiquí, del lado costarricense, con el objetivo de ocupar puestos estratégicos en el curso del río y reforzar dos destacamentos colocados allí con anterioridad para evitar el avance enemigo.

La primera columna estaba al mando del general Florentino Alfaro, y estaba formada por alajuelenses.

Como los costarricenses no tenían embarcaciones, se excavó una vereda paralela al cauce del río hasta su desembocadura en el río San Juan, estableciendo una base a la que llamaron El Muelle.

Advertido de este movimiento, el capitán John M.Baldwin, cuyas tropas se encontraban en La Trinidad, organizó una fuerza de 100 filibusteros que remontaron el río con el propósito de sorprender a los costarricenses, dividiéndola para ello en dos columnas, una que atacara por tierra y otra en cuatro embarcaciones grandes y dos pequeñas.

Las bajas filibusteras fueron cuatro hombres en tierra y muchos en el agua, además de una embarcación.

Ilustración de la Batalla de Sardinal por Raúl Francisco Arias Sánchez.