Bera

Sin embargo, esta carta es considerada apócrifa, y el detallado testamento de Guillermo, fechado en 804, no menciona a Bera entre sus hijos.

[8]​ La designación de Bera como conde no solo estableció una autoridad local en Barcelona, sino que sentó las bases para una administración feudal en la Marca Hispánica, asegurando la presencia carolingia en una zona vulnerable y facilitando la defensa frente a futuras incursiones musulmanas desde el sur.

[5]​ Bera participó en varias campañas militares entre 804 y 809 para intentar expandir la frontera sur de la Marca Hispánica hasta el río Ebro.

Este río se consideraba una barrera natural estratégica que podría servir como defensa contra el Emirato de Córdoba.

Ante esta resistencia y las dificultades logísticas, las tropas de Bera se vieron obligadas a retirarse hacia el norte para evitar ser completamente derrotadas.

Al igual que en la expedición anterior, el ejército franco fue dividido en dos columnas con la intención de rodear y someter la ciudad.

Sin embargo, la estrategia no resultó efectiva, ya que las fuerzas francas fueron detectadas por el valí de Tortosa, quien organizó rápidamente un contraataque.

Al llegar a Tortosa, los francos establecieron un asedio que duró aproximadamente cuarenta días, buscando finalmente romper la resistencia musulmana en la región.

Sin embargo, durante el asedio, las tropas francas se encontraron con una nueva dificultad: la llegada de refuerzos enviados desde Córdoba y comandados por Abderramán II, hijo del emir Al-Hakam I.

Con la aparición de estas fuerzas musulmanas adicionales, los francos se vieron superados en número y amenazados por una posible contraofensiva.

Bera consideraba que mantener la estabilidad en la Marca Hispánica era fundamental para consolidar las posesiones francas en el noreste de la península ibérica.

Este armisticio, impulsado por Bera como medida de pacificación en la Marca Hispánica, tenía como objetivo reducir el desgaste militar y estabilizar la región frente a las amenazas fronterizas.

Carlomagno, aunque escuchó las quejas, respaldó temporalmente la postura de Bera, permitiéndole continuar con su estrategia conciliadora en la frontera.

Ese mismo año, un ejército musulmán dirigido por Ubayd Allah Abu Marwan, tío del emir Al-Hakam I, intentó sitiar Barcelona, pero fue repelido por fuerzas locales, probablemente compuestas en gran parte por tropas de origen visigodo.

Esta victoria reforzó el prestigio de Bera, cuya relación con la nobleza visigoda local era sólida y le proporcionaba un respaldo considerable.

Sin embargo, al ser de mayor edad y menos hábil en combate, Bera fue derrotado, lo que selló su destino.

Dominios de Bera y de Gaucelmo : Condados de Gaucelmo: Rosellón (790-832) y Ampurias (813-832) Condados de Bera: Razés y Conflent (790-820) A Bera en el 801: Barcelona A Bera en el 813: Gerona