La bibliotecología comparada es uno de esos temas que, en el desarrollo de sus fundamentos teóricos, se ha encontrado con una amplia gama de publicaciones sobre el tema y posteriormente se dejó de escribir sobre ello, sin embargo, se siguen publicando libros y artículos que utilizan el método comparativo y que son ejemplos de que se sigue usando el método y aunque no se les clasifique en su indización como tal, siguen siendo estudios comparados.
Mencionan que consiste en: “el análisis de las bibliotecas, los sistemas bibliotecológicos, algunos aspectos o problemas bibliotecarios en dos o más ambientes nacionales, culturales o sociales” [1] Asimismo, mencionan que esta tiene el propósito de comprender las similitudes y diferencias para determinar las explicaciones con el objetivo final de llegar a generalizaciones y principios válidos.
De acuerdo, a este enfoque Kumar menciona el concepto incluye: En “bibliotecología comparada”, se remite a la idea de “bibliotecología internacional”.
“También sirve para hacer comparaciones entre varios países y observar los desarrollos realizados en el lugar de origen y conocer las prácticas exitosas que pueden ser implementadas en otra región geográfica”[3] André de Figueiredo menciona que la bibliotecología comparada “se interesa por la solución de un problema específico por medio de la cooperación de diferentes contextos culturales como una disciplina académica formal”[4] Se considera un método para investigar las causas y efectos en el proceso de desarrollo bibliotecario.
Dicho análisis podrá servir para mejorar la situación actual de las bibliotecas a través de estudios comparados, tanto a nivel local como internacional, intercambiando información y datos con pares, pues en el contexto de lo que se denomina Bibliotecología Internacional, los estudios comparativos tienen la finalidad de ampliar y profundizar nuestra comprensión sobre los problemas profesionales.