Desempeñó cargos principalmente domésticos en las comunidades a donde había sido destinada.
[1] El 9 de noviembre de 1936, los milicianos invaden el recinto de las Adoratrices, arrestando a las religiosas, incluyendo a Blasa, a quien tuvieron que bajar cargada porque sola ya no podía.
Sin importar su edad y sus achaques, Blasa fue asesinada, junto a otras veintidós mujeres, la madrugada del 10 de noviembre en las tapias del cementerio de la Almudena.
[3] En esta ceremonia se beatificaron 498 mártires de la Guerra Civil de España del siglo XX.
Los restos mortales de Blasa se veneran en Monumento a los Caídos del cementerio de Vicálvaro.