Botond

La tradición en la Crónica Ilustrada húngara establece que en 907, la nación húngara lo escogió a él, al jefe Lehel y al jefe Bulcsú como tutores del joven príncipe Zolta tras la muerte de su padre, el Gran Príncipe Árpád.

Tras la derrota en occidente, los húngaros comenzaron a hacer incursiones hacia oriente, intentando someter las regiones fronterizas del Imperio Bizantino.

Según las leyendas húngaras, el jefe húngaro Apor y Botond viajaron cerca del año 960 a Constantinopla, exigiéndole un impuesto de guerra al emperador bizantino (el cual probablemente era Romano II).

Un enorme gigante griego fue escogido para luchar por los bizantinos, mientras Botond, de contextura más bien pequeña, representaba a los húngaros.

Sin embargo, a la vista de griegos y húngaros, Botond derribó al gigante y con su mayal abrió un hueco en un portón bizantino de la ciudad, intimidando al propio emperador.

Botond , jefe tribal húngaro luchando contra el gigante griego frente la las puertas de Constantinopla . Se ve al jefe Apor sobre su caballo blanco, y encima del portón roto se ve al emperador bizantino y a su esposa. Imagen de la Crónica Ilustrada húngara (siglo XIV ).