[2] En 1396 se encuentra la palabra broxa, en aragonés, en las Ordinaciones y paramientos de Barbastro.
Carmelo Lisón Tolosana considera que el origen de la palabra puede encontrarse en el área pirenaica.
Debe tenerse en cuenta que en esta época el Languedoc y la Corona de Aragón eran áreas culturalmente muy relacionadas.
También se ha sugerido que proviene del nórdico antiguo varð-lokkur, "llamador de espíritus",[10][11][12] pero el Oxford English Dictionary lo considera poco plausible debido a la extrema rareza de la palabra nórdica y a que las formas sin -k dura, que concuerdan con la etimología del inglés antiguo ("traidor"), se atestiguan antes que las formas con -k.[13] Aunque la mayoría de las víctimas de los juicios por brujería en la Escocia moderna eran mujeres, algunos hombres también fueron ejecutados por ser considerados brujos.
[14][15][16] En su época, el matemático John Napier fue considerado brujo o mago por su interés en la adivinación y las ciencias ocultas, aunque su sólida posición probablemente impidió que fuera procesado.