Se llama cabriola[1] al salto vivo y corto en que el caballo levanta el cuarto delantero, imitando precisamente al salto típico de las cabras.
[2] Es un salto que forma el caballo sin echarse hacia adelante ni ganar terreno de modo que, estando en el aire, muestra primeramente las herraduras de los pies y dispara luego un par de coces con toda la fuerza que puede lo que se llama anudar la agujeta y algunos llaman también a este salto salto de firme a firme.
La cabriola es un manejo por alto y el más difícil de todos los aires elevados.
Se dice que un caballo se presenta por sí propio a las cabriolas y que se pone sobre las cabriolas siempre que forma saltos iguales у en la obediencia de la mano de la brida, esto es, sin forzar la mano del jinete y sin pesar ni cargar sobre ella.
Para enseñar a un caballo a manejarse bien en las cabriolas, conviene ponerle entre los dos pilares y hacerle levantar primeramente el cuarto delantero y en seguida el trasero, pero cuando el delantero se halla todavía en el aire.