La calle Escolta se sitúa en la zona oeste del Manila histórico, en lo que se ha conocido históricamente como extramuros, en contraposición a la zona amurallada de intramuros, siendo hoy en día una arteria financiera que alberga importantes edificios e históricamente una de las principales calles comerciales de la ciudad.
El área se pobló originariamente con comerciantes chinos, principalmente de la región de Fujian, que llegaron a trabajar durante el periodo del Galeón de Manila.
En aquel entonces la calle era una arteria comercial que ofrecía multitud de artículos de importación que provenían de China, Europa y América, directamente desde México.
En la zarzuela "El pay-pay de Manila" hay una canción que habla de la calle en este sentido: Al volver de la Escolta Charito tras comprarse un precioso paipay, y una carta encontró de Pepito en su rocabay, ¡Ay, que se le cai!
En el número 35 de esta calle tuvo su estudio fotográfico Francisco Van Camp, uno de los pioneros en la fotografía en Filipinas.