Más tarde comenzó a sentirse atraída por las mujeres, saliendo con la Jefa de Cirugía Cardiotorácica, Erica Hahn, pero la relación no funcionó y Erica la abandonó después de una pelea.
En la séptima temporada, Arizona se va a África dejando sola a Torres y, unos meses después, vuelve y se entera de que Callie está embarazada de Mark Sloan.
Por culpa del accidente, la hija de Callie, Sofía tuvo que nacer prematura y, al principio, eso asustó mucho a sus tres padres (Callie, Mark y Arizona).
Al final de temporada, Arizona le es infiel a Callie, esta se entera, lo cual empeora su relación.
Según comentó la escritora (Shonda Rhimes) en una entrevista con ABC, el destino de Callie Torres era retomar su vida con Arizona Robbins y su hija Sofía después de varios años.
Finalmente, después de varios capítulos, Callie regresaría con Arizona, retomando su relación y enfrentando así a los nuevos rumores que estos generarían en el hospital.
Desafortunadamente después de recibir nuevos proyectos, Sara Ramírez abandona el programa (con la posibilidad de un regreso a futuro) dándole así un giro diferente a la historia de este romance; Así, Callie abandona Seattle dejando atrás el Grey Sloan Memorial Hospital.
Ella le reconoció como el interno que realizó una operación a corazón abierto sin ayuda en un ascensor atascado tras un corte de luz, salvando así la vida del paciente.
Interesada claramente en conocerle mejor, Callie le dio su número de teléfono a George.
Sin embargo, a la mejor amiga de George, Izzie, Callie no le caía muy bien, pues pensaba que ella era muy rara, lo que se confirmó cuando una mañana, Callie estaba en casa de Meredith, Izzie y George, y soñolienta utilizó el cuarto de baño mientras que Izzie y Meredith estaban adentro.
Callie es nombrada nueva jefa de residentes ganándole el puesto a Miranda Bailey y Sydney Heron.
Tras una amistad intensa durante la cuarta temporada que termina en un intercambio de besos, Callie inicia una relación amorosa con la cirujana Erica Hahn, la doctora que ocupa el puesto dejado por Preston Burke.
La ruptura con Callie es peor aún, cuando ella defiende a Izzie por lo que hizo.
Es en esta temporada, cuando Callie le dice a su padre que está saliendo con alguien y le presenta a Arizona, él decide quitarle todo respaldo económico, ya que no puede aceptar la bisexualidad de su hija y eso le genera una serie de problemas.
Cuando comienzan las discusiones entre Callie y Arizona sobre si tener bebés o no, se separan, pero vuelven a final de la temporada.
Cuando Callie despierta del accidente le dice a Arizona que se casará con ella, pocos capítulos después ellas se casan, revelando que la madre de Callie es homofóbica, y que no acepta el matrimonio lésbico, ni a un bebé fuera de él.
Después de una aparente reconciliación, una mujer llamada Lauren aparece en el hospital, a quien no le importa coquetear con Arizona, aún sabiendo que está casada y de lo cual Callie no se entera.
Después de que Callie pierde el juicio por la custodia de su hija Sofía, Arizona decide compartir la custodia y finalmente Callie se muda a Nueva York.