Como patrimonio religioso cabe destacar una ermita dedicada a San Isidro.
Próxima al casco urbano en dirección hacia Arquela, podemos contemplar una encina centenaria, árbol, que junto con las sabinas son abundantes en nuestro territorio.
El motor económico de la población se sustenta por la actividad agrícola y ganadera.
Cerca se avista la iglesia en honor al patrón, un poco más arriba la barbería y el horno justo debajo.
Entre los que destaca el “fuerte” montado por sus vecinos casi al final del pueblo, en el que los mayores (y los no tanto) se reúnen por las tardes a jugar a variados juegos de naipes.