En 1944, tras la retirada del ejército alemán se cerraron y desmantelaron las instalaciones.
El gobierno francés aplicó la legislación sobre emigración que había aprobado en 1938 y procedió a internar a los refugiados españoles en campos de concentración que construyó en el llamado "midi francés".
El 15 de mayo se inauguraron las instalaciones que ocupaban 30 hectáreas y estaban formadas por 250 barracas.
Los internos, procedentes en su mayoría de otros campos ya saturados, llegaron a 24.000 personas.
Tenían relación a los partidos Esquerra Republicana de Catalunya, Estat Català, Unió de Rabassaires i Altres Cultivadors del Camp de Catalunya y funcionarios de la administración catalana debido al interés del gobierno francés de mantener separados a estos refugiados de otros republicanos españoles dadas las divergencias políticas y a las negociaciones con la Generalidad de Cataluña que intentaba concentrar a los catalanes en un mismo espacio evitando la dispersión y dislocación del colectivo catalán en el exilio.
[4] El campo tenía tres secciones o sectores, las dos primeras se ocuparon con refugiados pertenecientes al Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) y la tercera por personas relacionadas con otros partidos catalanes, haciendo evidente la ruptura entre el mundo republicano catalán.
Compuesto por barracones ligeros, el campo estaba diseñado para albergar a 20.000 personas, pero acogió a más de 24.000 en condiciones precarias, especialmente en términos de salud.
El arqueólogo Francesc Prat i Puig junto a Raymond Aris, realizó diferentes investigaciones en una finca cercana, la finca de Clape, cerca del cabo de Agde, donde descubrió un poblado Íbero con murallas y una necrópolis.