Captafol

El captafol ha causado alergia y dermatitis de contacto en el hombre.

En un estudio limitado de empleados implicados en la manufactura del captafol, ningún exceso significante de mortalidad podría ser asociado con la exposición a este plaguicida.

El captafol, administrado en una dosis oral única, o en estudios dietarios a corto plazo, no resultó tóxico para las aves.

Sin embargo, niveles altos de exposición pueden causar daños reproductivos.

Sin embargo, dada su demostrada alta toxicidad, la exposición de los organismos acuáticos al captafol a través del desplazamiento casual y/o pérdidas es causa de preocupación.