Nacido en Turín en 1886, finaliza sus estudios de química en esa ciudad (1908) y obtuvo más tarde su doctorado en química en la Universidad de Turín.
Enseña en las universidades de Nápoles y de Turín como profesor ayudante hasta 1921, cuando es nombrado director del Laboratorio Químico-Petrográfico del Ufficio Geologico en Roma.
[3] En su honor recibe el nombre de perrierita un mineral encontrado en Nettuno (Lazio), un silicato de tierras raras, hierro, manganeso y titanio.
[3] El isótopo 97 del tecnecio (97Tc) fue el primer elemento químico producido artificialmente.
Lo descubrieron Carlo Perrier y Emilio Segré en la Universidad de Palermo,[4] analizando blancos de molibdeno que habían sido bombardeados con deuterones (iones de hidrógeno pesado, 2H+).