Carlos Castel y González de Amezúa

Hijo adoptivo y predilecto de Teruel, diputado a Cortes en Madrid, se distinguió por su acendrado amor a esta tierra aragonesa de la que fue gran benefactor.

[1]​ Hijo de Carlos Castel y Clemente (1845-1903), ingeniero de montes, político y científico turolense, estuvo casado con doña Ángeles Cabrera.

[1]​ Dicha decisión se justificaba en la presunta mala conciencia de las instituciones hacia su persona con el siguiente argumento: «el patricio ilustre, el gran Carlos Castel murió pobre, tan pobre que un familiar generoso y magnánimo pagó su entierro.

Además de reseñar su currículo, la comunicación funeraria anunciaba que el duelo se despediría en el Templo, y que no se repartirían esquelas.

En la plaza de Carlos Castel, conocida como plaza del Torico,[3]​ hubo un intento de realizar un monumento conmemorativo en su honor que no se realizó, aunque sí se colocó una placa conmemorativa en una de las fachadas de la plaza, con un relieve diseñado por Jesús Bueno.

Vista parcial (occidental) de Teruel, con detalle del Seminario y torres mudéjares de San Martín y El Salvador, año 2006.